La reunión tuvo como objetivo presentar las primeras aproximaciones al trabajo mancomunado por parte de ambas entidades con vistas a la implementación del Observatorio de Violencia y Género. Así también se dio a conocer las actividades que se vienen desarrollando en el Observatorio de los Derechos de los Niños, Niñas y Adolescentes que funciona dentro de la Defensoría desde el año 2013, poniendo a disposición los recursos humanos y materiales producidos en este, con la finalidad de abordar la temática de manera conjunta.
La creación del Observatrio tendrá “la función de medición de las políticas públicas, respecto a la erradicación de la violencia y su correlato directo con la niñez y la adolescencia” aclaró Labat. En este contexto, la función del Observatorio de los Derechos de los Niños, Niñas y Adolescentes de la Provincia de Misiones tiene un rol fundamental en dicha tarea.
Por su parte, el Defensor Mgter Miguel A. Molina resaltó la urgencia en la unificación de los datos, el análisis de los mismos desde el IPEC y la puesta en común a quienes tienen a su cargo la toma de decisiones y a los actores pertinentes sobre las estrategias a ser abordada en la prevención de la violencia contra las vidas de los niños, niñas y adolescentes de nuestra provincia. Remarcando que: “Todo niño o niña golpeada no siempre será un adulto golpeador, pero sí todo adulto golpeador fue un niño golpeado”.
Es por ello que es fundamental la creación de espacios institucionales donde se realicen tareas de observación, recolección de datos y monitoreo de los mismos. En este marco, el Defensor declaró que “el Observatorio de Violencia y Género, al igual que el Observatorio de los Derechos de los Niños, Niñas y Adolescentes de la Provincia de Misiones, responden directamente a lo planteado por UNICEF respecto al adquirir conocimientos sobre la violencia y su efecto directo sobre la niñez y adolescencia, siendo una herramienta fundamental con vistas a implementar, evaluar, planificar y diseñar políticas públicas para eliminar la violencia”.
Desde UNICEF se resalta que: “Todos fuimos niños alguna vez. Es algo que todos tenemos en común. Muchos tenemos hijos o estamos involucrados de alguna manera en la vida de algún niño. Deseamos que los niños crezcan y se conviertan en adultos felices, saludables, sanos y productivos. Queremos que prosperen. Los niños constituyen tanto el presente como el futuro. Representan la próxima generación de padres y madres; de abuelos y abuelas; de personas a cargo del cuidado de grandes y pequeños; de maestros; de doctores; de policías; de jueces; de dirigentes comunitarios, religiosos y políticos; y de personas responsables de la toma de decisiones. La manera en que respondemos hoy ante la violencia que afecta a los niños tendrá consecuencias directas en las familias y sociedades futuras. Debemos resguardar la integridad de la niñez hoy y en el futuro”.