Para ello el Programa de Servicios Agrícolas Provinciales (PROSAP), cuya coordinación está en manos del ministerio del Agro y la Producción de Misiones y es ejecutada a través de la Unidad para el Cambio Rural (UCAR) del Ministerio de Agroindustria de la Nación implementa, a nivel provincial y nacional, proyectos de inversión pública social y ambientalmente sustentables, incrementando la cobertura y la calidad de la infraestructura rural y de los servicios agroalimentarios.
El ingeniero Fernándo Velázquez, Coordinador Ejecutivo del PROSAP – Misiones explicó que en este trabajo, que se realiza entre la Nación y el gobierno provincial, es sumamente importante el esfuerzo del Estado misionero al invertir el 20 % de la contraparte que solicita todo proyecto para su ejecución que, en este caso corresponde a electrificación Rural. “Una de las grandes deficiencias que tienen los productores de Misiones es la disponibilidad de energía, que es un factor estratégico a abordar si definimos un mayor desarrollo productivo de la provincia. En ese Marco el Gobierno de la Provincia de Misiones definió como prioridad inversiones en el área de Electrificación Rural en un proyecto que comenzó en el año 2004 y lleva tres etapas hasta hoy”.
A finales del año 2015, se pone en Marcha la Licitación de la Segunda Etapa de la FASE III y en agosto de 2016 el Gobernador de Misiones, licenciado Hugo Passalacqua, junto al ministro de Agro y la Producción, ingeniero José Luis Garay entregaron más de 10 millones de pesos destinados al anticipo del Programa de “Electrificación Rural de Misiones (PROSAP)", dando inicio a la segunda etapa.
“Actualmente el proyecto se encuentra ejecutado en un 60% y a muy buen ritmo, y con los agravantes de las lluvias de mediados de año que, complicaron bastante el tendido rural” expicó Velázquez.
Agregó que “el objetivo general de este programa es el de generar el desarrollo de las economías regionales por medio de inversiones en la infraestructura en el sector agroindustrial.
La estructura que producen las redes energéticas promueve procesos de cohesión y solidaridad, además ayudan a consolidar situaciones de fragmentación y exclusión territorial.
La importancia de la electrificación rural se encuentra en la adecuación de las condiciones del medio rural con lo urbano para mitigar la migración rural-urbana.
Esta falta de electrificación que se está supliendo tiene implicaciones directas en las familias rurales de la zona, cubriendo ambos problemas tanto domésticos como productivos. En este contexto, el proyecto de Electrificación Rural en la provincia de Misiones comenzó en 2004 a raíz de la necesidad de servicios básicos y electrificación de los productores y sus familias.
En la Fase que I del proyecto de Electrificación Rural implicó la instalación de 525 km. de líneas de media tensión y a 120 km. de líneas de baja tensión. A su vez, se instalaron 800 Transformadores Rurales alcanzando 1.557 productores y sus familias. En la Fase II del proyecto se montaron líneas de media tensión monofásica de 402 km., 11,2 km. de líneas de tensión convencional y 117 km. de líneas de baja tensión. 882 transformadores fueron instalados, y en este caso se logró un impacto en 1.683 productores y sus familias.
La Fase III, se dividió en dos etapas, siendo más grande y ambiciosa. La Etapa I benefició a 2.870 productores afectando un total de 124.225 hectáreas y tendiendo 1.020 km de Obra. Se incorporan al servicio eléctrico 4.953 fincas agrícolas y 16 clientes mayores, de importante actividad.

Reconocimiento Internacional

Los resultados Socioeconómicos Productivos de este proyecto fueron reconocidos en el congreso Internacional de Agronegocios, organizado por IFAMA, que se desarrolló en la ciudad de Aarhus, Dinamarca, en junio de 2016. De estos se desprendió que “La electrificación no solo mejora la calidad de vida y las condiciones de producción equiparando a los centros urbanos. Este beneficio en el estado de confort de los productores conduce al desarrollo económico social de la región y definiendo que estas “intervenciones públicas” en electrificación rural contribuyen a un círculo virtuoso con los productores y sus familias. Mejorar la calidad de vida aumenta la relación entre los agricultores y permite el acceso a las innovaciones tecnológicas.
Como resultado, los agricultores pueden acceder a nuevos mercados aumentando sus ganancias. Esto genera un efecto de contagio sobre la economía regional al dar una plataforma para nuevas oportunidades de inversión, desarrollo y, en consecuencia mejoras en las condiciones sociales, económicas y ecológicas.

La conectividad en las chacras

En el año 2017, se presentaron dos proyectos de Conectividad rural, en conjunto con Marandú Comunicaciones S.E y el Ministerio del Agro y la Producción.
En pos de que la agricultura continúe siendo competitiva en el mercado internacional, debe poder responder a las exigencias que se le plantean a sus productos para acceder a los mercados internacionales en términos de los factores precio (para lo cual debe ser eficiente) y no precio (calidad, presentación, oportunidad, cumplimiento con estándares ambientales y probablemente en un futuro próximo con estándares sociales, etc.)
La aplicación de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones en el funcionamiento de las cadenas de valor de bienes y manufacturas de origen agropecuario (AgroTIC) aparece como un área estratégica a promover. Las AgroTIC favorecen una mayor comprensión y precisión en las evaluaciones del riesgo, toma de decisiones políticas, una mejor gestión de los procesos de comercialización, mayor efectividad en el acceso a mercados, además de abrir nuevas posibilidades para brindar servicios públicos a las comunidades rurales, tales como educación, salud y banca.
Esta herramienta permitirá orientar las estrategias y acciones de intervención para el desarrollo de sistemas de sanidad agropecuaria e inocuidad de alimentos eficaces y eficientes.