En este sentido explican que, el asma es una enfermedad crónica frecuente, que se caracteriza por la inflamación de las vías respiratorias. Los síntomas son: tos nocturna o en el ejercicio, silbidos en el pecho, fatiga, sensación de opresión en el pecho, falta de aire. Quienes conviven con ella sufren un impacto en su calidad de vida.

Al tiempo que agregan “las causas dependen de cada sujeto, su predisposición genética y de una serie de factores desencadenantes o neumoalergenos como el humo de tabaco, hongos, polen, ácaros del polvo, animales domésticos, medicamentos, la exposición a alérgenos es capaz de producir síntomas en personas sensibilizadas”.

“Existen sustancias y otros factores que actúan como irritantes como ser: gases, desodorantes, lacas, productos de limpiezas, cambios de temperatura, frío, aire acondicionado, que favorecen la aparición de síntomas”, precisan.

A modo de prevención, recomiendan evitar cambios bruscos de temperatura, prevenir cuadros virales, resfríos y gripe con medidas de higiene y fundamental la vacunación antigripal, antineumocóccia y evitar los desencadenantes antes mencionados.
Día Mundial del Asma
El primer Día Mundial del Asma se celebró en 1998 en más de 35 países conjuntamente con la primera Reunión Mundial sobre el Asma celebrada en Barcelona, España. Desde allí, el primer martes de mayo se conmemora la fecha organizada por la Iniciativa Global para el Asma (GINA) para mejorar la concienciación y el cuidado de la enfermedad en todo el mundo.

Datos y cifras sobre el asma
Se calcula que hay 235 millones de personas con asma en el mundo, que es la enfermedad no transmisible más frecuente en los niños. La mayoría de las muertes corresponden a adultos de edad avanzada.